Quizás sea dura tu batalla

 

La obra de Mario Santizo, entretejida en el paisaje cultural y político, juega con la manera en la que la economía de la necesidad y nuestros quebrantos se mezclan al mismo tiempo con el humor y la violencia de forma impredecible y salvaje.

 Durante casi 20 años, Santizo ha laborado constantemente, dando clases, exponiendo y organizando exposiciones. Es prolífico, produciendo siempre proyectos lúdicos que van, con un solo gesto, de lo ligero a lo cínico, a lo mordaz, a lo gregario. Estudia el humor, observando qué nos hace reír y qué nos incomoda. Es decir, la obra de Santizo encuentra la manera de llegar a otros ámbitos, haciéndonos mirar nerviosos a nuestro alrededor aún mientras sonreímos.

 En Actos de agresión, Santizo abraza a los artistas de Guatemala. En su gesto observamos ternura e incomodidad, que presenta también uno de los pocos retratos de esta comunidad tan diversa y compleja. En Predecir el futuro exactamente, Santizo ha creado un video-dibujo de sí mismo cayendo una y otra vez. Para predecir el futuro uno debe estar consciente de la caída inminente. Y sin embargo, a menudo preferimos mirar hacia otro lado, imaginar un arcoíris en vez de ver la tierra alzándose para encontrarnos. El estado real de las cosas, la instalación de Santizo que consiste en globos de helio que llevan cuadros turísticos de Guatemala, se hunde gradualmente. Los globos apenas pueden elevar estas imágenes perfectas por un tiempo breve antes de que el helio se disuelva. Otra vez, caemos.

 Para terminar, el fuego, una pieza que Santizo titula Interior, una colección de hogueras pintadas que llena el cuarto. El fuego, que es a la vez una fuente de vida, un participante en la tradición ritual, y un recordatorio de la violencia y la pérdida, no deja espacio para respirar. En un solo gesto hábil Santizo muestra su amplitud emocional. Aquí, nos quita el aire y nos deja sin aliento.

Laura August, 2019.

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